Ayer fui a ver nuevamente a Susana a su programa que fue excelente y tuvo de todo. Comenzó con Cristian y Verónica Castro, luego la abuela y el fabuloso sketch de la diva con Emilio Disi, Sofía Gala y como broche de oro Pimpinela.
Tanto Pimpinela como Cristian y Verónica Castro fueron divinos con el público y desde donde yo estaba ubicada se podía ver perfectamente todo.
Cuando terminó el programa Susana se quedó conversando un rato con Pimpinela, Pablo Alarcón y Rocío, la hija de Lucia Galan.
A la salida me fui para la Rosa Negra porque Susana había dicho que iba a cenar con Cristian y Verónica Castro.
Cuando llegué estaba yo sola y un ratito después llegó Cristian con un montón de paparazzi y algunos fans entre los que estaba una compañera mia del ISEC, Mariela. Al llegar al restaurante pude tomar alguna foto del cantante pero alguien se cruzo y Cristian ya quería entrar. Me quede esperando a Susana segura de que iba a ir para allá y un rato después llegó acompañada por su amiga y asistente Ines Hernández y por su chofer Marcelo.
Susana me saludo y hablamos un ratito mientras los periodistas tomaban algunas fotos. Yo solo saque una porque no tengo la tecnología necesaria para sacar muchas, porque cuando la veo a Susana me concentro en ella y porque después de posar un ratito para la prensa ella dijo basta. Susana estaba divina y de excelente humor.
Lorna
Tanto Pimpinela como Cristian y Verónica Castro fueron divinos con el público y desde donde yo estaba ubicada se podía ver perfectamente todo.
Cuando terminó el programa Susana se quedó conversando un rato con Pimpinela, Pablo Alarcón y Rocío, la hija de Lucia Galan.
A la salida me fui para la Rosa Negra porque Susana había dicho que iba a cenar con Cristian y Verónica Castro.
Cuando llegué estaba yo sola y un ratito después llegó Cristian con un montón de paparazzi y algunos fans entre los que estaba una compañera mia del ISEC, Mariela. Al llegar al restaurante pude tomar alguna foto del cantante pero alguien se cruzo y Cristian ya quería entrar. Me quede esperando a Susana segura de que iba a ir para allá y un rato después llegó acompañada por su amiga y asistente Ines Hernández y por su chofer Marcelo.
Susana me saludo y hablamos un ratito mientras los periodistas tomaban algunas fotos. Yo solo saque una porque no tengo la tecnología necesaria para sacar muchas, porque cuando la veo a Susana me concentro en ella y porque después de posar un ratito para la prensa ella dijo basta. Susana estaba divina y de excelente humor.
Lorna
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