SinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.comSinDisplay.com

domingo, 11 de marzo de 2007

Gustavo Yankelevich hablo de Susana (Perfil)

Era un sueño por cumplir
Yo tuve, desde que empecé a trabajar en esto fantasías o sueños que, dicen, cuando uno le pone mucha energía y lo desea con fuerza, se te cumplen.
Gustavo Yankelevich
2007-03-10 22:37:08

Yo tuve, desde que empecé a trabajar en esto fantasías o sueños que, dicen, cuando uno le pone mucha energía y lo desea con fuerza, se te cumplen. Desde hacía muchos años sentía una gran admiración por Carlos Montero, y todas las ganas de trabajar con él, pero yo estaba en canal 9 y él en el 13, parecía que eran dos líneas paralelas que nunca se iban a cruzar.

Sin embargo, el destino hizo que se crucen, eso fue en el 83 y en aquel momento encontré en Carlos Montero diez años de socio, y después toda la vida de amigo.

Me quedaban dos sueños más para cumplir: uno era producir a Alberto Olmedo y el otro a Susana Gimenez. A Alberto Olmedo, lamentablemente, no llegué. El día que me enteré que se murió Olmedo me angustié muchísimo: porque se había muerto, por la forma en que se había muerto y porque ya no lo iba a poder producir. Era un sueño roto. Pero me quedaba uno más por realizar y era producir a Susana Gimenez. Tuve la suerte de estar cerca de ella, de los diez años que estuvimos en Telefe, los últimos ocho. Susana entró en el 92, pero si bien estábamos cerca, yo no la producía . Esta es la primera oportunidad que tengo, no solo de producirla sino de cumplir aquella asignatura pendiente.

¿Cómo se me dio? En octubre del año pasado me llamó Susana y me dijo que me quería ver. Yo no sospeché nada porque siempre nos veíamos o nos cruzábamos varias veces al año, de modo que no pensé que sería para proponerme producir su programa.

Vino con toda esa simpatía que la caracteriza, más cuando tiene que seducir (ella es una gran seductora), y era algo muy divertido verla esa tarde aquí en mi oficina. Por supuesto que la esperábamos como se merece Susana, un ramo de flores, bocaditos, champagne (solo tomó un vaso de agua), en fin…imaginé que me quería consultar algo. Claro, unos minutos, pero minutos apenas antes de que llegue, me llamó Claudio Villarruel (esto Susana no lo sabe) y me dice “te va a ir a ver Susana”, le contesté “está viniendo ahora”, y me anticipa “te va a proponer algo especial”. Claudio entonces me pide “por favor, no se la hagas difícil.Susana es Susana”. Colgué el teléfono y me empecé a intrigar.

Susana llegó, nos dimos un beso, pasó a mi oficina, le entregamos las flores y antes de sentarnos, ella todavía con el abrigo puesto me dice “Gustavito me tenés que producir”. Susana fue directo al grano. Nos reímos, nos sentamos, le digo “me estás cargando”, “no, es en serio, vuelvo a la televisión si vuelvo de tu mano” me contesta seria ,en realidad, en serio.

Le pedí a Susana que me diera un tiempo para encontrar el espíritu del programa, no queremos cambiar la estructura que va a ser la misma, pero sí va a tener cambios importantes de contenido. Pasaron tres semanas y nos encontramos, le conté lo que quería hacer, le gustó mucho y a partir de ahí empezamos a trabajar juntos. Fundamentalmente lo que le dije y coincidimos fue el espíritu de lo que queremos para Susana 2007 que es: HUMOR, EMOCION, Y FIESTA. Ese es el programa que queremos. Y estamos trabajando para eso.Todo el programa tiene que respirar de esa manera… En ese sentido hay un formato que reune las tres cosas: y es el circo de las estrellas. Por eso lo elegimos.La noté a Susana feliz, lo demostraba. Cada día en el trabajo está plena.Siempre derochando simpatía, y sin saber, que al haberme elegido me estaba ayudando a cumplir el sueño que me faltaba.

No hay comentarios.: